Presentamos este texto realizado por Luis Arizmendi sobre el legado de Rosa Luxemburg y el cruce de lecturas que ella realizada sobre El Capital y las que han hecho sobre su obra.
La lectura histórico-concreta de El capital de Rosa Luxemburgo en el nacimiento del marxismo crítico
Mirar retrospectivamente, a un siglo de distancia, una de las intervenciones más radicales en la fundación del marxismo clásico, como la que realizó Rosalia Luxemburg, resulta tanto propicio como prolífico prospectivamente en un tiempo como el nuestro, en el que se encuentra en curso el renacimiento internacional del marxismo crítico debido a la explosión de la crisis más grave en la historia de la mundialización –una crisis que, desde el carácter unificado aunque múltiple de sus colapsos, por constituir en sí misma una era cabe denominar como crisis epocal del capitalismo del siglo XXI (Arizmendi, 2013)–. El
marxismo crítico del nuevo siglo enfrenta el desafío de renacer heredando y llevando más lejos las mejores lecciones teóricas y políticas producidas por la historia del marxismo clásico el siglo pasado. En ese horizonte, Rosa Luxemburgo, sin duda, constituye una figura crucial. Ella fue quien forjó la primera lectura poderosa de El Capital en la historia mundial del marxismo crítico.
Marxismo crítico o marxismo clásico, que son sinónimos –en contraste con el limitado término “marxismo occidental” inventado por Perry Anderson (1979), otorgando artificialmente el monopolio del marxismo crítico a Occidente–, constituye una expresión adecuada para nombrar ese horizonte del discurso crítico que se negó, una y otra vez, a la conversión del marxismo en un “saber que no sabe nada” (para decirlo evocando
una expresión originaria de Sartre), precisamente, porque fue integrado y vencido por alguna de las versiones del mito del progreso abandonando el cuestionamiento a la unidad histórica indisociable entre Capitalismo y Barbarie. Visto, así, puede identificarse que la desfiguración que introdujo el marxismo progresista se desdobló incluyendo dentro de sí, además del “marxismo soviético” gestado en Oriente, al “marxismo socialdemócrata” gestado en Occidente. Antes que Historia y conciencia de clase de Georg Lukács (1969) o
Marxismo y Filosofía de Karl Korsch (1971), la fundadora teóricamente más vigorosa del marxismo crítico –que tanta influencia ejerció para la célebre obra de Lukács– fue, inapelablemente, Rosa Luxemburgo.
Consultar la publicación Rosa Luxemburgo ante el relanzamiento del marxismo crítico en el siglo XXI